¿Cómo combatir el soroche o mal de altura?

En nuestros viajes por la sierra del Perú, hemos conocido lugares asombrosos. Sin embargo, muchos de ellos se encuentran a miles de metros por encima del nivel del mar, donde el aire tiene menor cantidad de oxígeno. Por lo general, las personas que vivimos en la costa o en lugares de poca altitud, tenemos problemas para adaptarnos a esta condición y experimentamos una serie de síntomas conocidos como mal de altura o soroche. Por eso debemos tomar precauciones para que nos afecte lo menos posible. Esta es una guía con tips comprobados que te ayudarán a prevenir y combatir el molesto mal de altura.

¿Cuáles son los síntomas del mal de altura?

Algunas personas son más propensas a padecer el mal de altura, así como también hay quienes no les afecta en lo absoluto. Los síntomas más comunes son:

Dificultad para respirar.
Mareos.
Nauseas.
Dolor de cabeza.
Agitación.
Debilidad.
Cansancio.
Aceleración del ritmo cardiaco.
Problemas digestivos.
Los casos más graves se dan en altitudes extremas (por encima de los 7500 m.s.n.m.), en los que puede causar edema pulmonar y cerebral, lo cual podría llevar a la muerte.

¿Cómo prevenir o curar el mal de altura?

No existe una cura inmediata para el soroche. Si bien es cierto existen algunos medicamentos que ayudan a aminorar los síntomas, hay que utilizarlos con mucha precaución porque podrían ocultar alguna otra afección mayor. Lo mejor es que te prepares previamente y sigas las siguientes recomendaciones comprobadas para prevenir y combatir sus efectos:

La aclimatación es lo principal; el ascenso debe realizarse lenta y progresivamente. Si dispones del tiempo suficiente, hazlo en varios días para que tu cuerpo se vaya adaptando poco a poco a las diferentes altitudes.
Evita fumar o beber alcohol mientras te aclimatas.
Mantenerse hidratado es muy importante, bebe mucha agua.
No te agites, ni realices mucho esfuerzo físico, al menos en el primer día.
Evita los cambios bruscos de temperatura. Abrígate mucho en zonas muy frías, incluyendo la cabeza con un gorro o chullo.
Evita las grasas y la comida pesada desde el día anterior al viaje.
Si comienzas a sentir los síntomas, debes hacer una pausa y descansar. Si pasa más de un día y estos no desaparecen, desciende a una zona más baja y acude a un centro médico.
Los remedios naturales más efectivos son el mate de coca y la muña. También ayudan los caramelos de limón.
El aspecto psicológico también podría influir, si tienes nervios o tensión pensando en que vas a ponerte mal, es muy probable que te pongas mal.

Ten en cuenta éstas recomendaciones, pero recuerda que la altura afecta a la gente de diferente manera y lo que funciona para algunos, puede no hacerlo para otros.

Finalmente y por seguridad, evita viajar sin compañía a un destino de altura, sobre todo a lugares solitarios o desolados en donde si te pasara algo nadie podría auxiliarte.