Máncora: paraíso de sol, diversión y bellas playas
(Duración: 4 días)
Máncora es un paraíso que tiene todo lo necesario para que disfrutes de unas vacaciones perfectas. Destaca por sus impactantes puestas de sol y hermosas playas que son ideales para la práctica de deportes acuáticos como el surf.
¿Cómo llegar a Máncora?
Por carretera desde Lima, puedes llegar a Máncora directamente por la Panamericana Norte, prepárate para disfrutar de la ruta, sin paradas son aproximadamente 18 horas de viaje.
Por avión, los aeropuertos de 3 ciudades nos acercan a nuestro destino: Piura, Tumbes y Talara. El más cercano a Máncora es el de Talara, partiendo de aquí en auto llegamos en 1 hora con 20 minutos. Un taxi te cobra 150 soles, pero también podrías optar por pagar 15 soles hasta el centro de Talara y a 2 calles de la plaza puedes tomar los buses o colectivos desde 10 soles por persona.
¿Dónde hospedarse en Máncora?
En la misma ciudad encontrarás muy buenos alojamientos, pero si buscas tranquilidad y disfrutar de las playas menos concurridas, hacia el sur existen hoteles que tienen todas las comodidades y la mayoría cuentan con acceso al mar. Por su cercanía normalmente la gente se traslada a esta zona en mototaxi. Nosotros nos hospedamos en el hotel «Máncora Beach Bungalows», uno de los más conocidos y bonitos de Máncora, con muy buena atención e infraestructura. Algo que resalta y nos gustó mucho es que todas sus habitaciones tienen terraza con una impresionante vista hacia la playa.
¿Qué hacer en Máncora?
El foco de la actividad en la ciudad gira en torno al malecón de la playa Máncora; turismo, comercio y gastronomía están al alcance de todos en una cuantas calles. Aquí nadie se aburre: deportes acuáticos, paseos a caballo y cuatrimotos son algunos de los pasatiempos preferidos por los turistas. Si nunca te has subido a una tabla puedes tomar clases de surf, con la garantía de que si no te paras en ella corriendo una ola no pagas. De noche la diversión continúa en los bares y discotecas.
A unos metros del malecón, en la avenida Piura (Panamericana Norte) encontramos la «Plaza Máncora», en cuyos alrededores podemos comprar todo tipo de artesanías, ropa, recuerdos e incluso refrescarnos con una deliciosa cremolada. Por aquí también tenemos acceso libre a la «albúfera de Máncora», un gran humedal que es conocido por ser un criadero de enormes iguanas.
Hacia el sur, en la zona hotelera que mencioné anteriormente están las famosas «Pocitas», una extensa franja de playa en donde barreras de rocas cerca de la orilla han formado piscinas naturales que son el deleite de grandes y chicos. Unos kilómetros más allá está «Vichayito», este es un bello balneario que al estar más alejado de la ciudad se caracteriza por su tranquilidad.
Si buscas un buen tour, te recomiendo el que te lleva a nadar con las Tortugas en el muelle «El Ñuro», una increíble experiencia que no te puedes perder. Posiblemente en el malecón de Máncora se te acerque algún «jalador» a ofrecértelo, procura preguntar a más de uno para que veas cual te da el mejor precio, porque durante un tour conversé con algunas personas que les cobraron casi el doble de lo que yo pagué. En todo caso acércate directamente a una de las agencias que están en la avenida Piura, una de ellas es «Rafo Tours», buen servicio y muy confiable.
¿Qué comer en Máncora?
La oferta gastronómica en Máncora en muy variada y para todos los bolsillos, si tienes un presupuesto ajustado puedes comer muy bien sin gastar mucho; indaga y sigue las recomendaciones de los lugareños. Evidentemente lo más tradicional es la comida marina y por su cercanía al muelle su frescura está garantizada, «del mar a tu mesa» es lo que te dicen a donde vayas.
Con esto finalizamos este relajante viaje. Coméntanos si te gustó esta experiencia o si deseas recibir información adicional.
Toda la información que encontrarás en este blog es puramente mi experiencia personal de viajero, no tengo ningún vínculo o relación comercial con ningún lugar visitado.